El Barça necesitaba visualizar un plan, proyectar un futuro y Xavi está dispuesto a liderarlo recuperando las esencias que le hicieron grande. Pero esto es un proceso y el Barça un transatlántico que no se gira de un día para otro.
En ese camino sigue, como se vio en el Pizjuán con un empate de equipo grande. Sin los tres puntos pero con sensaciones para soñar en lo que viene el 2022.
Al equipo todavía le falta cuajo, sigue tierno en las dos áreas, como se vio en el primer tanto del Sevilla. Ocurrió en una jugada ensayada. Córner lanzado por Rakitic y rematado por el Papu Gómez a la derecha de Ter Stegen.
El gol llegó tras algún aviso del Sevilla, que vio como le anulaban por fuera de juego un gol de Rafa Mir. De nuevo tocaba remar a contracorriente, una asignatura que el Barça suspende desde hace meses. Cuando recibe un golpe se cae. No fue el caso en el Pizjuán, porque el Barça respondió con grandeza.
Primero, con un cabezazo de Araujo, que saltó por encima de todos, se suspendió en el aire, y puso la igualada. La sensación que deja el equipo es que, cuando tenga recursos de primer nivel, recogerá los frutos de las buenas sensaciones.
En el terreno de las buenas sensaciones(sin concretar) también se encuentra Dembélé, que en cada partido deja tantos brotes verdes como desconexiones desesperantes.
El francés es más un talento volátil que un jugador sobre el que construir un proyecto. A su lado jugó un ariete que no entraba en las quinielas de nadie para el primer equipo llamado Jutglà.
Hay futbolistas que tiene muy claro en qué no son buenos. Por lo general saben exprimir sus cualidades y hacen mejores a sus equipos.
Son jugadores que no se empeñan en cada jugar en reivindicarse ni se esfuerzan en aparentar lo que no son. Jugadores como Jutglà, que mejoran a sus compañeros a base de sentido común y generosidad.
En el Pizjuán volvió a jugar con una gran personalidad, sin miedo de acabar las jugadas, ofreciendo líneas de pase con sus desmarques y generoso en el pase.
El Barça salió a encerrar en su área al Sevilla en su casa. Y lo hizo con muchos jugadores jóvenes y sin grandes estrellas, pero con un plan.
Xavi está dispuesto a liderar la reconstrucción con valentía. Con dos extremos y un equipo atacando. Renunciando a futbolistas con más nombres, pero con un presente tétrico como Coutinho o Luuk de Jong. Apostando por una hornada de jóvenes ante uno de los mejores de la competición, en su casa y con un diluvio arrollador.
El dominio de Gavi
Y ante la dificultad apareció de nuevo Gavi. En su tierra, cerca de Los Palacios, con los cordones desatados, mostró arrojo y personalidad.
El niño de los 96 goles, los que marcó en el benjamín del Betis, hizo suyo el centro del campo del Barça. Su ambición, la de un niño de 17 años, marca el camino del Barça.
Esta vez se quedó sin marcar, pero fue Abde el primero en tener una de las ocasiones más claras en la segunda mitad. El Sevilla fue perdiendo los nervios, algo que se concretó con la expulsión de Koundé, que le tiró un balonazo a la cara de Alba.
Con el empate Xavi dio entrada a Nico y Lenglet, y se fueron Jutglà y Eric.Gavi pasó a jugar de falso nueve un ratito como ya ocurrió ante el Elche. Lo intentó el Barça, que encerró al Sevilla en el área, pero le faltó contudencia y talento.
FICHA TÉCNICA – Liga Santander
SEV 1-1 FCB
Sevilla
Bono; Koundé, Diego Carlos, Fernando, Rekik; Delaney (Augustinsson, 86′), Jordán, Rakitic (Gudelj, 70′); Ocampos (Valentino, 90′), Papu Gómez y Rafa Mir (En-Nesyri, 70′).
Barça
Ter Stegen; Araujo, Piqué, Eric (Lenglet, 73′); Busquets, Alba, De Jong (Luuk de Jong, 85′), Gavi; Dembélé, Jutglà (Nico, 73′) y Abde.
Goles
1-0, M. 32, Papu Gómez. 1-1, M45. Araujo.
Árbitro
Carlos del Cerro Grande (Colegio madrileño). TA: Busquets (4′), Delaney (36′), Abde (74), Gavi (76′), J. Sánchez (88′).. TR: Koundé (64) por lanzar un balón a la cara de Jordi Alba.
Incidencias
Partido aplazado correspondiente a la 4 jornada de LaLiga Santander de la temporada 2021/22, disputado en el Sánchez Pizjuán.