Muchas fueron las críticas que durante la semana recibió Real Madrid TV por explicar el habitual trabajo que hace Ricardo de Burgos Bengoetxea contra la entidad madridista y la realidad es que se quedaron cortos.
Los jugadores de Carlo Ancelotti recibieron un ‘atraco’ esta tarde en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán, en una noche que difícilmente podrán olvidar los jugadores merengues.
Lo de Ricardo de Burgos Bengoetxea fue realmente nefasto, incidiendo claramente en el resultado final, ya que le anuló dos goles al Real Madrid, no pitó un claro penalti sobre Vinicius Jr. y no amonestó cuando correspondía a los jugadores del Sevilla.
Los hechos contra el club blanco comenzaron muy temprano después que anulara un gol de Fede Valverde en el minuto 3 por un supuesto fuera de juego de Jude Bellingham que dejó muchas dudas y que el VAR no fue capaz de despejarlas.
Sin embargo, el momento más escandaloso llegó en el minuto 10 tras una incomprensible parada del partido de De Burgos Bengoetxea cuando el Real Madrid tenía el balón y salía rápido a la contra, en una jugada que acabó con gol de Jude Bellingham, que tampoco subió al marcador.
Esta acción generó un gran enfado entre los jugadores del club blanco, ya que el árbitro detuvo el duelo para que atendieran a Lucas Ocampos, quien rápidamente se recuperó y el equipo merengue se quedó sin gol.
Además, por si esto no fuera poco, De Burgos Bengoetxea no señaló un penalti sobre Vinicius Jr. de Jesús Navas, en una acción que fue muy reclamada por los futbolistas de la entidad madridista.
El trabajo del colegiado fue realmente malo, con muchas lagunas e incongruencias en sus decisiones, permitiendo que Sergio Ramos hiciera lo que quisiera, tomando incluso de la cara a Antonio Rüdiger.
Muchas son las acciones por las que el Real Madrid se debe sentir esta tarde ampliamente perjudicado, aunque seguramente algunos seguirán hablando del madridismo sociológico.