El Real Madrid logró una grandísima victoria en el campo del Sevilla por 2-3. Los de Ancelotti, que fueron perjudicados gravemente por el árbitro, llegaron a ir perdiendo por 2-0 y consiguieron una remontada con sabor a campeón.
Fiel a la costumbre que ha cogido en los últimos meses, Ancelotti ofreció su alineación para el encuentro dos horas antes de que la pelota se pusiera a rodar. Esta vez lo hizo con sorpresa. No porque juntara a Valverde con Camavinga, algo que con la baja de Casemiro ya se intuía, sino porque también puso bajo el mismo paraguas de la titularidad a Lucas y a Carvajal, quedando Nacho en el banquillo. Esa no se la esperaba nadie, quizá tampoco Lopetegui.
Como era de esperar, hubo mucho respeto desde el arranque del choque. El Madrid tenía problemas a la hora de sacar el balón desde atrás por culpa de la presión alta de los locales, sin embargo, cuando la tenía a la altura de medular podía estar tiempo con ella porque, a partir de ahí, el equipo de Lopetegui prefería pertrecharse atrás juntándose mucho.
A partir de aquí, lo de siempre. Al Madrid le escamotearon un penalti claro por mano de Diego Carlos. Venderán la cantinela de siempre, pero el curso pasado al Madrid le costó el campeonato una mano de este tipo, de las que ahora llaman ‘involuntarias’.
Dos errores groseros del Madrid y dos goles en contra
Después de esto, el ‘despelote’ del Madrid. Lucas Vázquez se equivocó sacando el balón desde atrás y eso propició una falta en la frontal por parte de Modric. El tiro estaba relativamente cerca del marco, era difícil que esa pelota superara una barrera normal, sin embargo, nadie contaba con el hecho de que Militao se moviera del muro y dejara un boquete por el que Rakitic embocó el 1-0.
El equipo de Ancelotti había regalado el 1-0 y, todavía con el guantazo en el cuerpo, estaba recibiendo el segundo. Un nuevo agujero en la zaga, con Lucas Vázquez demasiado abierto y con Militao llegando con menos fuerza al cruce de la deseada, acabó con Lamela empujando la pelota al fondo de la red tras una salida a la desesperada de Courtois.
El Madrid estaba pecando de una falta de intensidad enorme. Perdía los duelos, no era capaz de robar pelotas en zonas peligrosas y, para colmo de males, no encontraba las teclas para meterle mano a un rival que vivía demasiado cómodo defendiendo. Los de Ancelotti acabaron algo mejor el primer tiempo, tampoco era difícil, pero con la sensación de que físicamente el rival se había venido abajo con el paso de los minutos y de que había opciones de cambiar el guión en el segundo tiempo.
Rodrygo salió…y marcó
Ancelotti era consciente de que tenía que tocar algún botón para cambiar la dinámica del choque. Quitó a Camavinga y dio entrada a Rodrygo volviendo a un 4-3-3 más reconocible y no tardó prácticamente nada en obtener premio. En una jugada de asociación, con Vinicius y Carvajal en la banda izquierda, un centro del lateral de Leganés lo cazó precisamente Rodrygo tirando una diagonal hacia el área y la enchufó con un gran golpeo de primeras. El Madrid volvía a llamar a la puerta de un partido que tenía mala pinta.
El árbitro se inventó una mano de Vinicius para anular un gol
El equipo de Ancelotti estaba minimizando al Sevilla de forma que parecía que estábamos viendo otro partido. Eso sí, lo que no cambió de ninguna manera fue la vergonzosa actuación del colegiado, Cuadra Fernández, que le anuló un gol legal a Vinicius por una supuesta mano que sólo vio él. El VAR llamó a capítulo al trencilla para que revisara una y otra vez la acción. En el Pizjuán tenían claro que iba a dar gol, sin embargo, para sorpresa de todos, el árbitro se señaló la mano y lo anuló. Una decisión tan sorprendente como vergonzosa.
El Madrid empató y el Sevilla se ‘cagó’
En el Madrid aún no se creían lo que estaban sufriendo en sus propias carnes. Un atraco de dimensiones desproporcionadas que, lejos de desconectar mentalmente al equipo, le hizo más fuerte. De hecho, poco después de la fechoría arbitral, el cuadro blanco iba a poner el 2-2 por mediación de Nacho. Carvajal, que había vuelto a la banda derecha, se sacaba de la chistera su segunda asistencia de la noche para que el mayor de los Fernández rematara al primer toque como si del mejor ‘9’ se tratara.
Jugadón de Rodrygo y Benzema completó la remontada
Pero aún quedaba lo mejor. El Madrid se iba a poner el traje de la remontada, el que ya usó ante PSG o Chelsea, para que Benzema materializara el definitivo 2-3 tras un jugadón de Rodrygo, el futbolista clave de la noche. El equipo blanco reventó la Liga y, salvo catástrofe, el equipo de Ancelotti ya huele a campeón de esta Liga a pesar del constante maltrato arbitral.
Ficha técnica
Sevilla 2: Bono; Navas, Koundé, Diego Carlos, Acuña (Gudelj 61’); Rakitic, Jordán, Papu Gómez (Oliver 46’); Lamela, Tecatito (Agustisson 61’) y Martial (Rafa Mir 39’)
Real Madrid 3: Courtois, Carvajal, Militão, Alaba, Lucas Vázquez (Nacho 81’), Kroos, Modrić (Asensio 81’), Camavinga (Rodrygo 46’), Valverde, Vinicius y Benzema (Mariano 98’)
Goles: 1-0 Rakitic (21’), 2-0 Lamela (24’), 2-1 Rodrygo (49’), 2-2 Nacho (82’), 2-3 Benzema (92’)
Árbitro: Cuadra Fernández. Amonestó a Camavinga, Martial, Diego Carlos, Oliver
Estadio: Sánchez Pizjuán.